sábado, 30 de noviembre de 2013

A MEDIA NOCHE




Los ruidos de la ciudad ya se fueron, quedan mis silencios que me envuelven y me empujan a dejar letras, a dejar sensaciones o sentimientos, es la hora del recogimiento en uno mismo, de deleitarse sacando a relucir esas pequeñas cosas que guarda nuestro interior.

No todo es sangre, agua y oxígeno, queda algo que no puede medir la ciencia y que está mucho más adentro de esas pequeñas cosas necesarias para nuestro pequeño y complicado cuerpo, esas sensaciones que nos manda el alma, esos latidos más fuertes de lo normal en nuestro corazón cuando ensimismados vemos la belleza, la ternura, la sonrisa, la mano amiga.

Me asomo a la ventana y veo a esa gran señora, vigilante nocturna de todo lo que ocurre entre el cielo y la tierra, esa que tanto sabe de nosotros cuando le contamos nuestras penas, y te dejo una sonrisa sabiendo que estás ahí cuidando que no nos falte luz en la noche, que no le falte compañía al poeta, que no sea reina la oscuridad.

Y cojo una cuartilla y garabateo palabras que hablan del ayer, de aquellas personas que pasaron por nuestra vida, que habla de hoy mismo, lo realmente importante y que ve tu luz como un destino, un faro y un camino.

Y salgo a la noche mientras tú me guías, me llevas al acantilado, me llevas a sentir el ronroneo de la mar, a sentir la brisa que acaricia y a mirar a las estrellas que son como miles de hogueras allá en la lejanía, y pienso en ella, en tantas vivencias, en los fracasos y aquellos momentos de felicidad que podrían llenar una vida y me marcho, me voy a seguir senderos, a cruzar riachuelos, a saludar al señor búho y a saludar a ese mundo que duerme, que sueña, que mañana amanecerá otra vez… y volverá a nacer.


Saudades - 2013
 

lunes, 25 de noviembre de 2013

MIRANDO AL MAR... SOÑÉ

Pierre Boucher



Estaba el abominable hombre de las canillas al aire, el Loco Sau, tumbado a la orilla del mar y le entró la soñarrera, soñaba, soñaba que su amada Esuperia se confundía con el mar, eran dos en uno y yo sabía a quién amaba más… la cervecita, las tapas. Ya me confundí otra vez, si es que tengo sueños que se mezclan unos con otros, la Bella Esuperia por un lado, el mar por otro, la cervecita al lado, el sol que me achicharra la única neurona en servicio.

Me levanto como un resorte y voy a ti, si tú la que me miras, veo que sales corriendo como si de una aparición se tratara, la playa queda vacía, todos sus habitantes salen disparados al ver al abominable, que se las trae.

Al fin solos, el mar, la Bella Esuperia, la cervecita no que ya me la he bebido, el mundo es nuestro, la arena de la playa recibe tu cuerpo que me atrae como un imán, me lanzo en picado y me quedo clavado en la arena, te fuiste como si fueras un sueño y el abominable hombre de las canillas al aire clavado a la arena a través de ese artefacto maligno conocido por las malas lenguas como tolón-tolón.

Descanse en paz.

 

Saudades - 2013



PD.- Esta entrada, tan loca como muchas, hace el número 500, son muchas las horas pasadas en este rincón, en ocasiones dejando hablar al corazón, otras veces a la imaginación, otras es la experiencia la que hablaba por mí y en la mayoría de las ocasiones he intentado dejar una sonrisa o un momento cálido en las personas que me leen.

Besos y abrazos.

 

miércoles, 20 de noviembre de 2013

SIENTO FRÍO



Siento frío en el alma cuando no estás

y los días pasan sin dejar huella, monótonos,

allí a lo lejos la vida sigue, con prisas,

acá envuelve con su manto la melancolía.

¿Volverás?

Y vienes sin hacer ruido, despacio,

y te acurrucas a mi lado y te entregas,

allí a lo lejos veo que amanece, hay vida,

acá el mundo gira en un habitáculo de dos.

 

Saudades - 2013
 

lunes, 18 de noviembre de 2013

TU LUZ, TU SOMBRA



La belleza de la luz y de la sombra, de tu cuerpo que se ofrece con los brazos al cielo mientras mis lápices de pastel trazan líneas que dibujan tu cuerpo, luces y sombras y mi cuerpo que vibra sintiendo tu belleza.

Y suena una música, suave, termino la obra y te entregas a mí, nos entregamos, y la vida comienza de nuevo, unidos, viajando por esos cielos donde habitan las estrellas, y las habitamos, y llenamos de amor muchos agujeros negros.

Amanece y veo luz en tus ojos, comienza un nuevo día, unidos, echando raíces el uno en el otro.

 

Saudades - 2013
 

jueves, 14 de noviembre de 2013

SÉ COMO EMPIEZA... NO COMO ACABA



Me levanto como siempre, medio sonámbulo, voy al baño, no está, se me abre un ojo, veo que estoy rodeado de árboles, ahora recuerdo que Stradivarius y yo hemos pasado la noche en mitad del bosque, como muchas veces nos ocurre a los aventureros, por costumbre me apoyo en un árbol, saco el tolón tolón y lanzo el chorro, cada vez alcanzo menos distancia, serán los años, allá a lo lejos me mira el sol que está asomando el careto, Stradivarius a lo suyo, a mirarme con cara de póker y a mordisquear la hierba, me atuso la melena al viento, me rasco la barba, me picaba, me pongo las botas de montar, ensillo al cuerdo de la pareja, el de cuatro patas, le monto, miro para allí y nos marchamos por otro lado, a lo que salga, lo nuestro es el disfrute de la naturaleza y allá vamos, encontramos una senda y la seguimos, nos lleva a la aldea de San Sulpicio donde vive nuestro amigo Agapito, su señora Agripina y sus tres hijas a cual más…

Me recibe con los brazos cerrados, mala señal, la señá Agripina como quien no ha visto ná de ná, las tres hijas salen de la cabaña alborozadas al ver al loco Sau, tan tieso encima de su caballo, mírale parece un cromo de un buscador de oro. Descabalgo con señorío y haciendo una reverencia a la señora de la casa me dirijo al abrevadero para que sacie su sed el bueno de Stradivarius.

Agapito de las Altas Torres y los Bajos Valles de la Fuentecilla Seca me pregunta que hago por aquellos lares que en otras ocasiones abandoné desnudo y a la carrera mientras me perseguían todos los perdigones que lanzaba su escopeta, le conteste muy serio: “Es la querencia Agapito, nunca he podido olvidar a tus tres hijas”, él se rasca la calva mientras piensa para sus adentros que sus hijas tampoco me han olvidado, y lo más grave, ¿qué habrán visto en mí?

Y le doy la razón a sus pensamientos porque en su calva es muy fácil leer, pero tengo un no sé qué y un qué sé yo que las ha entrado por derecho a sus niñas, que le vamos a hacer, de repente veo a unos niños jugando, unos a gatas, otros corriendo, otros tirando piedras a los pájaros, me rasco el coco y me digo para mis adentros, “A quién coño me suenan esos  despelujaos?

¡RELECHES!!!

Veo que Agapito va a la cabaña y sale con la escopeta, no se hable más, salgo de allí escopetao, mientras un perdigón me atraviesa el sombrero de ala ancha, la jodimos, otra vez será, nos espera la inmensidad del mundo para recorrerlo, nos espera la luna para admirarla y nos esperan muchas mozas perdidas (como yo) en mitad del sendero.

¡Es muy achuchá la vida de aventurero, ya te digo!

 


Saudades - 2013



Conciencia: “Quiero hablar del Loco Sau que me ha tocado en desgracia. Durante sus primeros años se dedicó al estudio profundo de la filosofía y la historia, sus libros de cabecera eran desde los clásicos hasta sus contemporáneos y fue tal el lío que se formó en su cerebro,  que en un momento dado se produjo un cortocircuito, que dejó como resultado una sola neurona  en funcionamiento, desde entonces, y van muchos años se le ve montado en su caballo recorriendo medio mundo sin una meta fija pero si una fijación, LA MUJER”


 
 

viernes, 8 de noviembre de 2013

TOMAR LA INICIATIVA FRENTE AL SEPARATISMO



Cualquier persona de empresa tiene claro un concepto sencillo, la timidez, la inactividad, el continuismo, es el preludio de la decadencia. Si no hay innovación, si no hay empuje, si no hay entusiasmo, si no hay una voluntad decidida y sin complejos, la empresa está abocada a languidecer hasta su desaparición. Un país es una empresa, es un proyecto vital de sus ciudadanos para convivir juntos y progresar. Si no hay fe en ese proyecto, la empresa no tiene futuro.

 En España estamos asistiendo a uno de los mayores desafíos que ha visto nuestra historia, estamos ante el empuje de los separatismos que buscan denodadamente la desintegración de nuestro país. La estrategia, desde la Transición, ha consistido en el apaciguamiento, en tratar de convencer a dichos separatismos de la conveniencia de vivir en común. Se ha cedido en todos los campos para buscar que se sintieran cómodos, los últimos años han sido una sucesión de concesiones, de cesiones, de manos tendidas, en la esperanza de colmar sus aspiraciones y construir un país donde todos tuviéramos cabida.

Todo eso ha fracasado. Los separatismos son insaciables, jamás se dan por satisfechos, cualquier cesión es el preludio de una nueva exigencia. Vehemente exigencia. Ante movimientos totalitarios, nunca en la Historia ha servido la táctica del apaciguamiento, no sirvió contra Hitler, no servirá ahora. Creo que es necesaria la firmeza. La defensa de las convicciones sin complejos.

 Una nación como España no podrá sobrevivir si no creemos en ella, y si no trabajamos activamente en su defensa. Hay que tomar la iniciativa, los separatismos han invadido los medios de comunicación, determinadas áreas de la cultura, manejan la educación a su antojo.

 Adoctrinan a las nuevas generaciones falsificando la Historia, mostrándoles un mundo de Oz tan irreal como delirante. España solo podrá salir adelante si esa mayoría silenciosa de españoles que creemos en ella, dejamos el silencio, abandonamos los complejos, defendemos y blindamos nuestra Constitución frente a los que se mofan de ella, nuestras libertades, nuestra Historia, hacemos honor a nuestros símbolos como país.

 Somos una de las naciones más antiguas del mundo, una de las que más ha aportado a lo largo de la Historia al progreso de la Humanidad, llevamos siglos conviviendo y avanzando. Y lo que es más importante, en España los ciudadanos somos libres, tenemos unas altísimas cotas de libertad individual, protegidos por nuestro Estado de Derecho. Esta empresa común que es España, como cualquier empresa humana, pervivirá mientras quienes la integramos la defendamos sin tibiezas, somos una amplia mayoría quienes creemos en ella, pero una mayoría acomplejada, nos dejamos comer el terreno por unos separatismos minoritarios pero enérgicos.

Cualquier cesión ante ellos, lo interpretan como una debilidad, una invitación a seguir devorando nuestro país. Es, creo, hora de abandonar la estrategia del apaciguamiento, no seguir cediendo ante los separatismos, tomar la iniciativa, creer en España, abandonar el silencio y, con convencimiento, seguir construyendo el país de nuestros abuelos, de nuestros padres, para que siga siendo la nación de nuestros hijos.

Pero en esta labor de todos no nos sentimos acompañados por los políticos que dicen representarnos y a los que hemos votado, ellos están tan divididos y tan enfrentados unos con otros que nunca se unirán para luchar contra esta lacra que padecemos, mientras, los separatistas se mofan de todo lo que une, otros, los que tendrían que dirigir este barco sólo están para pagar sus dispendios, para mimarlos y para dejarlos seguir haciendo la nación que sueñan y que nunca fue.

¡Qué vergüenza de casta política!
 

martes, 5 de noviembre de 2013

"GRANADA" LA NOVIA DESEADA




Granada, para los reyes cristianos, era la novia deseada pero jamás poseída; muchas veces llegaron a un tiro de herradura de sus puertas, pero el afán de conquistarla se ahogaba en las disputas internas. Antes que Isabel entrase en la ciudad lo podía haber hecho su padre el Rey Juan II.

 

El primer día de Julio de 1431, las tropas de Juan II, cansadas de destrucción y pillaje por la vega granadina -como lo habían estado poco antes las de don Álvaro de Luna, que tras arrambar con un buen botín volvieron a territorio castellano-, se enfrentaron a las tropas musulmanas, las cuales habían abandonado su alcazaba para presentar batalla al infiel. En la batalla de La Higueruela, el desorganizado ejército del inestable Muhammad VIII fue duramente castigado. El rey, sin embargo, no quiso entrar en la ciudad, antes bien ayudó -gracias a la intersección del misterioso Pedro de Venegas- a que el débil príncipe sobrino de Muhammad VII y Yùsuf II, ocupase el trono de Granada. Yùsuf IV murió de muerte natural a los seis meses de subir al trono y de prestar juramento de vasallaje a Juan II.

 

El romancero hizo verso de la batalla de la Higueruela, verso en el que aquel que debía suceder a Muhammad VIII, era el moro Abenámar, hijo de un musulmán y de una cristiana cautiva:

 

Abenámar, Abenámar,

moro de la morería [....]

¿Qué castillos son aquellos?

!Altos son y relucían!

-El Alhambra era, señor,

y la otra la Mezquita;

los otros los Alixares,

labrados a maravilla.

El moro que los labraba

cien doblas ganaba al día

y el día que no los labra

otras tantas se perdía;

desque los tuvo labrados

el rey le quitó la vida

porque no labre otros tales

al rey del Andalucía.

El otro es Torres Bermejas,

castillo de gran valía;

el otro Generalife

huerta que par no tenía.

 

Hablara allí el rey don Juan, bien oiréis lo que decía:

 

-Si tú quisieras Granada,

contigo me casaría;

daréte en arras y dote

a Córdoba y a Sevilla.

-Casada soy, rey don Juan,

casada soy, que no viuda;

el moro que a mí me tiene

muy grande bien me quería. [....]

 

Granada, la amante deseada, continuó casada con el moro durante un tiempo, hasta que la hija de aquél pretendiente que pregunta por los castillos altos y relucientes de la Alhambra la conquistó. Granada era una ciudad con poco territorio, poseía treinta mil vecinos, ocho mil caballos y más de veinticinco mil ballesteros, y en sólo tres días podía juntar en los lugares de La Alpujarra, sierra, valle y vega de Granada cincuenta mil hombres de pelea.

 

Esta es la pequeña "pincelada" del último reino moro de España.

 

  

PD.- Y yo aquí persiguiendo a una castellana que cada atardecer se pasea por las almenas del castillo, ¡RELECHES!!!